Uno de los momentos más destacados de lo que está transcurriendo hasta la fecha en la 62 edición del Festival Internacional de Cine de Berlín fue sin duda la presencia codiciada de Meryl Streep.
Su presencia allí estaba justificada por la entrega a la estrella del Oso de Oro de Honor a una carrera llena de éxitos.
Bette Davis la nombró su heredera y Katharine Hepburn su actriz favorita, una leyenda viva con 30 años en esta profesión y 17 nominaciones al Oscar de los cuales ha obtenido dos, haciendo que estemos quizás ante una de las mejores actrices de todos los tiempos.
Así que ya la rueda de prensa celebrada el pasado 14 de febrero antes de la entrega de dicho galardón fue todo un acontecimiento. Meryl hizo alarde de simpatía en su presentación ante los medios en la Berlinale coincidiendo con el estreno de ‘La dama de hierro’ en los cines alemanes:
Repaso esa figura desde sus años de Dama de Hierro hasta la vejez, lo que efectivamente implicó mucho maquillaje. Pero lo más complejo fue representar un personaje del que, sinceramente, no me siento cerca. Era una apuesta compleja, lo sé, pero evitar ese aspecto sería desdibujarla.
Una prueba más de su magnífico magisterio es que con su papel de Margaret Thatcher ha arrasado en multitud de premios cinematográficos, de momento, el BAFTA y el Globo de Oro 2012 a la mejor actriz ya son suyos.
No es de extrañar entonces que al recoger el merecido Oso de Oro de Honor se llevara una de las más grandes y sonoras ovaciones de la Berlinale.
El hueco en sus vitrinas para su tercer oscar está hecho. Y parece cantado, un galardón con el que siempre ha coqueteado esta fantástica actriz: nunca ha dejado de optar a él con más de cinco años de separación, pero que no lo gana desde 1982, cuando lo consiguió con la fantástica ‘La decisión de Sophie’. Este es su año de nuevo.
- Vía | Terra Noticias
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