‘Sucker Punch’, trailer. Zack Snyder contraataca

Me acuerdo cuando el amigo Zack Snyder me flasheó el cerebro con el primer trailer de ‘Watchmen’. Hay que reconocer que indiscutiblemente Snyder es un crack en lo que respecta a la ‘visualidad’ de sus películas, y con aquella pieza de infarto uno no pudo más que rendirse absolutamente a sus pies.
Luego vino la decepción por el tostón, sensación generalizada a pesar de la previa superexpectación mundial y a juzgar por las cifras taquilleras: 130 millones de dólares de presupuesto, que no se recuperaron en zona USA (107) y que se amortizaron ‘in extremis’ gracias al flotador mundial (187).

Así que, si sus señorías me lo permiten, me reservaré mis más efusivos impulsos al opinar sobre este trailer de ‘Sucker Punch’, y aguantaré mis ansias de gritar por esto que se nos presenta ahora como una ilusionante cinta ‘pateadora de traseros’.
Más que nada porque, con la patata en la mano, desearía que este filme sí reventara taquilla lo mismo que hizo ‘300′, con el viejo Zack de hijo pródigo (con permiso de ‘Ga’Hoole - La leyenda de los guardianes 3D’).

Esta versión radical de ‘Alicia en el País de las Maravillas’ promete, y la lectura de su trama no hace sino aumentar las ganas de que éste sea el regreso triunfal de un tipo que nunca debió bajar un peldaño en Hollywood:
‘Sucker Punch’ es una fantasía épica de acción que nos lleva a la imaginación de una joven cuyo mundo imaginario y soñado le ofrece una escapada ideal de su realidad más oscura. Sin la contención de los límites de tiempo y lugar, ella es libre de ir donde su mente la lleva, pero sus increíbles aventuras desdibujan las líneas entre lo real y lo imaginario … con consecuencias potencialmente trágicas.

Musica tecno , dragones, soldados zombies, punk sci-fi, y unas chicas como Abbie Cornish (’Stop-Loss’), Jena Malone, Emily Browning (’Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snicket’), Vanessa Hudgens (’High School Musical’), y Jamie Chung (’DragonBall’) que cualquiera las tendría como noviesitas.
Por favor, que se olviden del tuneo al 3D. El 25 de marzo de 2011 no querría llevarme otra vez un desagradable chof.