Y pensar que Roland Emmerich podría haber sido el director de este remake.
Para alivio de sus detractores, y regocijo de los fans de Paul Greengrass, se ha anunciado que el director de la mítica saga Bourne está en conversaciones para ser el que caliente la silla de realizador de ‘Fantastic Voyage’, revisión de un clásico de 1966 que James Cameron producirá.
Noticia que le otorga a este proyecto un mayor interés, y expectación. Sí, porque lo de que sea en 3D, como que ya está empezando a sonarnos a cuento chino.
Aunque en este caso la cosa es completamente distinta a la de aquellas versiones ‘tuneadas’ en post-producción para atrapar incautos. Me gusta comprobar que hemos aprendido rápido en diferenciar cuándo es una película rodada en 3D, que chapuzeada después en tres dimensiones.
Greengrass y Cameron trabajarán con la misma tecnología que la utilizada con ‘Avatar’, así que en ese aspecto, desde el punto de vista técnico, ya podemos estar muy tranquilos de que saldrán algo potente.
Que luego el guión también sea un adorno, pues es posible. Habrá que echarle la culpa esta vez a Shane Salerno, el mismo que escribió el guión de ‘Alien vs. Predator’, que no sé yo si le conviene que se lo recalquemos en su curriculum.
Salerno tendrá que darle nueva forma a esa historia de un científico, el profesor Jan Benes, que tenía en su poder un formulón para Premio Nobel: con él se podía mantener reducido el cuerpo humano a tamaño microscópico por tiempo ilimitado.
Los villanos de turno interceptan la fórmula provocando un accidente de circulación, antes de que sea entregada al Pentágono.
El profesor huye con la ayuda de un agente de la CIA, pero se queda impedido a causa de un derrame cerebral que presagia su muerte. Sin embargo, un grupo de cinco científicos son miniaturizados e introducidos en el flujo sanguíneo de Benes con el objetivo de evitar que la palme.
Lo dicho, con un guión interesante y el 3D avatárico, este blockbuster podría ser un pelotazo grande.
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