MEXICO ALA VANGUARDIA
En la que es posiblemente la primera película de ciencia ficción propiamente dicha rodada en español en Latinoamérica, mas allá de la tradición de películas de cine fantástico en donde los alienígenas y las momiasasesinas eranlosprotagonistas, “Traficantes de sueños” (Sleep dealers) nos presenta una visión del futuro en la que la absorción de la tecnología ha crecido hasta diluir la frontera entre máquinas y humanos. Sin embargo, a pesar de los avances tecnológicos, las desigualdades entre norte y sur permanecen inamovibles.
El director de cine Alex Rivera a su paso por el festival “Discovering Latin America” en Londres habla sobre su proyecto:
El director de cine Alex Rivera a su paso por el festival “Discovering Latin America” en Londres habla sobre su proyecto:
“Las películas de ciencia ficción siempre muestran el futuro en lugares como Los Ángeles, Nueva York o Londres pero nunca en Calcuta, Lima o México DF. ¿Acaso el futuro solo afecta a las metrópolis ricas?”.
“Es lógico pensar que en el futuro habrá lugares al margen del desarrollo, en donde las condiciones habrán empeorado. Para mí, un pueblo en el desierto de México es un escenario del futuro tan creíble como una ciudad en la que circulen coches voladores. Como dijo William Gibson, escritor y visionario que invento el término ciberespacio, el futuro ya esta aquí, sólo que no ha llegado a todos de forma igualitaria“.
Las ideas de Alex Rivera concuerdan con lo que el realizador mexicano Alfonso Cuarón plasmo en la película Niños del Hombre (Children of Men, 2006). El argumento de la película es el siguiente:
El problema de la migración ha terminado ahora los trabajadores mexicanos pueden trabajar en Estados Unidos sin salir del país, siendo conectados a través de dispositivos instalados en sus cuerpos a un entramado de cables y realizando movimientos repetitivos controlan robots en distintas ciudades de Estados Unidos. Se dedican a recolectar fruta o trabajar en la construcción, dirigidos de forma virtual por los trabajadores al otro lado de la frontera. Mientras que en el campo, el agua es un bien precioso controlado por las corporaciones de Estados Unidos que se vende a precio de oro a los campesinos.
Las ideas de Alex Rivera concuerdan con lo que el realizador mexicano Alfonso Cuarón plasmo en la película Niños del Hombre (Children of Men, 2006). El argumento de la película es el siguiente:
El problema de la migración ha terminado ahora los trabajadores mexicanos pueden trabajar en Estados Unidos sin salir del país, siendo conectados a través de dispositivos instalados en sus cuerpos a un entramado de cables y realizando movimientos repetitivos controlan robots en distintas ciudades de Estados Unidos. Se dedican a recolectar fruta o trabajar en la construcción, dirigidos de forma virtual por los trabajadores al otro lado de la frontera. Mientras que en el campo, el agua es un bien precioso controlado por las corporaciones de Estados Unidos que se vende a precio de oro a los campesinos.
Alex Rivera es natural de Brooklyn. Su padre, de origen peruano llegó a Estados Unidos como inmigrante. El trabajo de Alex ha estado marcado por su pasión por en el género de ciencia ficción y su interés sobre la experiencia de los inmigrantes latinoamericanos en Estados Unidos.
Esta visión del futuro no es tan descabellada: “Actualmente hay compañías diseñando robots que funcionan remotamente dirigidos por seres humanos. En Irak y Afganistán se están llevando a cabo operaciones quirúrgicas a soldados por control remoto hechas por cirujanos en Londres o Chicago.
Esta visión del futuro no es tan descabellada: “Actualmente hay compañías diseñando robots que funcionan remotamente dirigidos por seres humanos. En Irak y Afganistán se están llevando a cabo operaciones quirúrgicas a soldados por control remoto hechas por cirujanos en Londres o Chicago.
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