Akiva Goldsman se está preparando muy bien su camino a la dirección.
Como guionista lo tiene todo demostrado, para lo bueno y para lo malo. Desde que en 1994 escribiera su primer script, el de ‘El cliente’, la película apañá de Joel Schumacher, ha ido intercalando guiones delicatessen y medio pelo (’Perdidos en el espacio’) a partes iguales, pero todos con casi el mismo resultado: ganarse prestigio en Hollywood.
Con Ron Howard, por ejemplo, nos ha dejado trabajos excelentes (olvidémosnos de los de la saga ‘Da Vinci’) como el de ‘Una mente brillante’, por el que ganó el Oscar al mejor guión adaptado en 2002, o ‘Cinderella Man’, los dos éxitos con Russell Crowe como prota. Lógico que piense en el neozelandés para su debut como director.
Goldsman ya tenía a Crowe para arrancar su carrera como director con ‘Winter’s Tale’, una adaptación de la novela homónima de 1983 de Mark Helprin. La trama se sitúa en Nueva York, a final del siglo XX, y sigue al ladrón irlandés Peter Lake, y a Beverly Penn, una joven heredera que, cuando está robando en su casa, se enamora de ella pero repentinamente muere en sus brazos.
Su amor por Beverly, y un don de gracia, le permitirán a Lake realizar las más extraordinarias y dolorosas exploraciones en el tiempo, descubriendo que puede detener el tiempo y resucitar a los muertos.
Pero Russell no sería el protagonista, porque Akiva le reserva el papel de villano, el de un jefe mafioso. Así que había que buscar un actor a la altura de Russell para que esto no desluciera. Y el nuevo fichaje para la producción es Will Smith que interpretaría a un juez. Tanto Smith como Crowe están trabajando ahora con Goldsman en el guión.
Sin embargo, dicen que ninguno de los dos serán los actores principales. Bueno, pero fijo que serán unos secundarios VIP.
Vía | LaButaca.net
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